martes, 30 de marzo de 2010

No solo para llorar. La cebolla

Quien no ha llorado picando cebolla, dicen que mirando un chorro del agua no te corren las lágrimas, pero corres el riesgo de volarte un dedo. También he oído que hay que ponerse un trozo en la cabeza, y aquí viene lo mejor; mientras mas celosa la mujer mas llora con la cebolla.
Pero este tubérculo para algunos tan odiado y para otros tan sabroso, tiene también muchas propiedades curativas. La abuela Tere corría con una tela de cebolla cada vez que veía a alguien con una herida decía que era para que no se infectara y que calmara el dolor, y debe ser por que tiene azufre, potasio además de vitamina C, entre otras. Costumbre que aprendí y que hasta el día de hoy uso con algunas heridas menores.
Recuerdo que por allá por los años ochenta debía cantar en una peña, la noche anterior habíamos estado ensayando en la casa de la Tere.Casi al finalizar el ensayo mi garganta ya no daba mas y para colmo estaba disfónica, cuando nos preparábamos para despedirnos, ella se me acerca con un vasito en la mano, era un brebaje de una aroma a cebolla que francamente no era para nada atractivo, me mandó a beberlo al "seco".
Era jugo de cebolla con miel que me indicó que me preparara al día siguiente antes de subir a cantar para aclarar la garganta. Debo reconocer que funcionó, aunque fue horrible y peor para quienes se acercaban a hablar conmigo, pero me sanó la ronquera. La mezcla consiste en jugo de cebolla con miel se beben unas 3 cucharaditas un par de veces al día, por sus propiedades antinflamaorias calma el dolor y desinflama la garganta, hay estudios que dicen que además tiene propiedades antibióticas.
La abuela Tere y sus cebollas...cada vez que la picaba un bicho, se pasaba un poco de cebolla, gracias a ella aprendí que no solo sirve para llorar.


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